LA MALA SUERTE DE ANDREAS MIHAVECZ

 

Andreas Mihavecz, de dieciocho años, fue detenido por la policía al ser sorprendido viajando como pasajero e un coche que provocó un grave accidente, era el 1 de abril de 1979. Después de ser detenido, fue reducido y abandonado en una celda del edificio del ayuntamiento de la localidad austríaca de Höchst.

Diecisiete días después, alguien se acordó que el detenido seguía en la celda. Fue rescatado al borde de la muerte por inanición. Este caso está considerado como la persona que ha estado más tiempo sin comer y ni beber.

Ninguno de sus tres captores, los agentes Markus Weber, Heinz Ceheter y Erwin Schneider, se interesó por él, creyendo que ya se habían ocupado sus compañeros y llegando incluso a ignorar las súplicas de la madre del joven.

El chico sobrevivió chupando la humedad de las paredes de su celda. Perdió veintitrés kilos de peso y necesitó varios meses para recuperarse totalmente.

En el juicio penal al que sometieron a los policías que le habían detenido, los tres se echaron mutuamente la culpa. Al final, fueron condenados a pagarle cuatro mil marcos alemanes, una cifra ridícula.

Dos años después, un juicio civil concedió a Mihahavecz doscientos cincuenta mil chelines austríacos, equivalentes a unos diecinueve mil euros.