INMOVILIDAD TÓNICA EN LOS ANIMALES

La inmovilidad tónica es uno de los comportamientos más peculiares del reino animal. Es un reflejo voluntario por el que el animal se queda paralizado y parece que está muerto.

Esta peculiaridad se puede observar en tiburones y otros peces cuando se les coloca de cabeza, se quedan en estado cataléptico. Parece ser que la reacción la provoca algún tipo de sobrecarga sensorial. Si no se les molesta, la mayoría de los peces vuelven a la realidad a los 15 minutos y recuperan la normalidad.

Estas parálisis se diferencian en dos tipos. Uno es la inmovilidad tónica, que el animal puede controlar, y otro es la tanatosis, que es un comportamiento instintivo en el que finge su muerte. Eso es típico de la zarigüeya, réptiles como la culebra de collar e insectos como el escarabajo pselaphidae.

La mayoría usa esta técnica como defensa, para engañar a sus depredadores o a otros miembros de su especie, aunque unos cuantos la utilizan para atacar, por ejemplo el escarabajo pselaphidae que engaña a las hormigas para que se lo lleven y luego se come los huevos y larvas de la colonia.