DE TODO UN POCO-2

El papa Esteban VI exhumó los restos de su predecesor, el papa Formoso, a quien acusaba de usurpador. Esteban VI condujo el cadáver a Roma, lo sentó al trono con su vestido papal y comenzó un concilio para juzgarlo. Al término de éste, mandó arrojar el cadáver al Tíber. Poco después, en el año 897 fue apresado por el pueblo y estrangulado.

Entre los años 1560 y 1670 se ejecutaron solo en el sudeste de Alemania 3200 brujas.

Las mujeres de la antigua Grecia empezaban a contar su edad desde que se casaban.

En Inglaterra, los ahorcados eran expuestos durante un tiempo como medida ejemplar. Para evitar que fueran atacados por animales carroñeros eran embadurnados completamente de alquitrán.

Cuando el matemático alemán, Karl E. Gauss se enteró de que su esposa estaba a punto de morir, él que estaba trabajando, respondió: Si, si, pero pídale que espere un momento hasta que acabe con esto.

El día que se enterró al boxeador Tom Sayers cerca de 30 000 seguidores acudieron al cementerio para despedirse de él. En el momento de la inhumación todos quisieron acercar a la tumba, pero al no poder hacerlo, lo intentaron a puñetazos.

En la antigüedad, el número de peldaños en los patíbulos variaba según la jerarquía del condenado. Así, el rey podía pedir que le colocaran un número ilimitado: los duques, ocho; los condes, seis; los barones, cuatro, y la gente humilde, dos.

Los egipcios morosos no podían ser enterrados hasta que la familia saldara todas sus deudas.

En la Edad Media, los niños que morían sin ser bautizados eran enterrados entre los muros de las catedrales, que eran llamados limbos.

En el año 1885 en un hospital de Londres falleció un señor obeso. A la mañana siguiente, los médicos se encontraron con el hinchado como un balón y relleno de gas. Al practicarle una pequeña incisión en la piel, de manera espontánea el gas salió y ardió.

Los indios de la Guayana preparaban un licor con las cenizas de los muertos.

En 1684, Jean-Baptiste Mouron, de 17 años, fue acusado y condenado a galeras durante cien años y un día. El chico cumplió el castigo íntegro y quedo libre a la edad de 117 años. falleció unos años después.