ESTETOSCOPIO

En la segunda década del siglo XIX, un joven científico bretón, René Theophile Laennec, inventó el estetoscopio. René, nacido en 1871, había aprendido del doctor Corvisart, médico de cabecera de Napoleón, a aplicar el llamado sistema de percusión, o lo que es lo mismo, diagnosticar mediante los sonidos o vibraciones que se producen por la aplicación de pequeños golpes en los pulmones del paciente. René se obsesionó por perfeccionarlo, ya que su madre estaba enferma de los pulmones.

Siendo médico en el Hospital de Necket, se le presentó el caso de una joven con una enfermedad cardíaca, la auscultación resultaba muy difícil debido a la excesiva obesidad de la paciente. Mientras pensaba en cómo resolver el problema, y paseando un día por los jardines cercanos al Louvre, observó a un niño que pegaba su oído a uno de los extremos de un tablón, que completaba una pila de trozos iguales, para escuchar mejor lo golpes que otro compañero daba en el otro extremo del mismo.

En ese momento se le encendió una luz, se dirigió al hospital y dio forma de cilindro a un cartón y lo aplicó en un espacio intercostal de la enferma. En el otro extremo escuchó los ruidos del corazón de la paciente. Había inventado el estetoscopio.

René Laennec, que murió a los 45 años, víctima, como su madre, de tisis, perfeccionó su invento hasta lograr trompetillas de madera que permitieron definir y diagnosticar algunas enfermedades pulmonares, bronquiales e internas.