MAHONESA

La salsa mahonesa es originaría de Mahón (Baleares). A finales del siglo XVIII ya era conocida y utilizada en la cocina mediterránea. Sus ingredientes eran y son, sencillos: aceite, yema de huevo y sal.

Al comienzo de la Guerra de los Siete Años (1756-1763), los franceses atacaron la fortaleza inglesa de Saint Philip, en el puerto de Mahón, que en ese momento era la capital de Mahón.

Richelieu tomó el puerto de Mahón en 1756, para celebrar la victoria se preparó una fiesta. Entre los diversos manjares que se sirvieron, estaba la salsa mahonesa, le encantó, y pidió la receta, llevándosela a Francia para que fuera servida en sus banquetes. En poco tiempo, la mahonesa, fue muy conocida entre los nobles y los burgueses franceses, donde era considerada un manjar de dioses.

El populismo del país hizo creer que la salsa era francesa. Según una historia del siglo XVI, el duque de Mayenne la inventó. Otros franceses cuentan que en la ciudad de Bayona es donde nació la salsa.

Richard Hellmann, propietario de una tienda de delicatesen del barrio de Manhattan, fue el que en 1912 empezó a venderla envasada den botes de madera de una libra de peso. Poco tiempo después la envasó en botes de cristal. Su popularidad fue en aumento, y con ella dejó de ser algo exótico par convertirse en algo habitual, utilizándose en bocadillos, hamburguesas, ensaladas, etc.