ANÉCDOTAS DE ISABEL II DE ESPAÑA
Isabel II de Borbón (1830-1904) nació del cuarto matrimonio
de Fernando VII con su sobrina María Cristina de Borbón. Pérez Galdós la
denominó “la de los tristes destinos”. Reinó entre 1833 a 1868.
Durante su reinado protagonizó multitud de anécdotas:
En una ocasión, le regaló la reina a su peluquera un vestido
de moiré antique (tela con un dibujo ondulado (regado) fabricado en seda), ésta
se lo dio a su modista para que se lo arreglase. Al deshacer la falda se
encontraron en el bolsillo algunos billetes, la modista se los entregó a la
peluquera, y ésta se lo devolvió a la reina. Isabel los rechazó diciendo:
-Quédate con ellos; son el adorno del vestido.
Cuando ya estaba desterrada en París y Alfonso XII era rey de España, nombró éste
embajador en Francia al general Serrano, que había sido el que derribó la
conspiración que derribó a Isabel II y que, según dicen había sido el primer
amante de la reina. Como tenía que hacer una visita de cortesía a Isabel II
pasó la noche anterior sin conciliar el sueño, ignorando cómo le recibiría la
reina. Cuando llego al palacio don residía, entró en el gabinete de la reina
Isabel inclinándose ante ella, que le dijo:
-¡Qué viejo estás! Pasa y siéntate aquí. ¿Cómo se encuentra
mi hijo? Pero ¡qué viejo estás!
El recibimiento no pudo ser peor, para alguien que había
sido su amante.
El 2 de febrero de 1852, Martín Merino (1789-1852)
(religioso y activista liberal), intentó asesinar a la reina cuando salía de
una misa de acción de gracias por su reciente parto. El cuchillo que utilizó
para matarla, se enganchó en las ballenas del corsé de la reina, desviándose la
puñalada y causándole solamente un rasguño. El asesino fue juzgado y ahorcado rápidamente.
Con ocasión de un baile de cotillón de honor de una fiesta
real, la reina, rompió el protocolo de la corte al negar su brazo al Presidente
del Consejo de Ministros, el general Leopoldo O’Donnell (1809-1867), para ofrecérselo
a Ramón María Narváez (1800-1868). Este acontecimiento provocó lo que se llamó “Crisis
del Cotillón”, que acabó con la renuncia al cargo de O’Donnell que fue
sustituido por Narváez.
Uno de sus amantes más conocidos
fue el general Francisco Serano (1810-1885), conocido como “El General Bonito”.
Se había enamorada de él antes de su boda y al que favoreció hasta que lo
convirtió en el hombre más poderoso de España, en esa época, llegando a poner
el gobierno en su poder. Se rumoreó que el general Serrano era el padre de su
hijo Alfonso XII.
2 comentarios :
Excelente explicación, siempre te leo, me encanta lo que colocas en tu blog. Muchos éxitos y espero sigas informándonos.
Muchas gracias, saludos.
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