HISTORIA DE LA ZARZUELA

Algo parecido a una zarzuela se representaba en la corte de Felipe IV. La música se reducía a una guitarra y al canto de algunas historias entonadas por tres o cuatro personas.

La primera zarzuela, así llamada, fue “El mayor encanto amor”, escrita por Sólis, Rojas y Calderón. Calderón escribió muchas otras, entre las que destacan: El laurel de Apolo y la Púrpura de la rosa, esta última escrita con motivo del matrimonio de la infanta María Teresa de Austria con el rey Luis XIV de Francia.

En tiempos de Carlos II, el condestable de Castilla mandó escribir algunas zarzuelas al escritor Francisco Bances Cándamo. Entre ellas la más famosa fue Duelos de ingenio y fortuna. En esa época, el director de escena de las zarzuelas tenía más importancia que el músico o el letrista, ya que los cortesanos iban al teatro más interesados por la puesta en escena y vestuario, que por el argumento y las canciones de la obra.

Con la llegada de los Borbones la afición decayó y dejaron de representarse en la corte, aunque continuaron en los teatros públicos. Los primeros reyes borbones atacados por una melancolía continua, se refugiaron en los tristes conciertos de los castrati italianos.

A finales del siglo XVIII renació el gusto por la zarzuela que empezó a considerarse como el único y exclusivo género nacional, olvidando que las operetas francesas o vienesas, también son una mezcla de declamación y canto.