MALDICIONES

La actriz Jayne Masfield (1933-1967) murió en un accidente de coche, decapitada por el parabrisas. Su muerte se vinculó por su relación con el satanismo, parece ser que pertenecía a la Iglesia de Satán, cuyo líder era Anton Szandor LaVey. Cuentan que Jayne le había pedido a Anton que maldijera a su novio, Sam Brody. El hechizo hizo su efecto y Brody se mató cuando su automóvil se empotró contra un tractor. El hechizo le salió mal a Jayne, junto a Brody, viajaba el chófer, la propia Jayne y varios de sus hijos. Los tres adultos murieron.

Bruce Lee (1940-1973) murió en extrañas circunstancias. Unos dicen que lo mató una maldición, otros que fue la mafia quien lo hizo por negarse a colaborar con ellos, algunos afirman que lo hizo el demonio, ya que había pactado con él para ser un buen guerrero. Hasta llegaron a decir que fue una sociedad secreta de maestros de artes marciales que envió a un ninja para evitar que revelara secretos a los occidentales. Lo más probable fuese que su muerte se debiera a una reacción alérgica o una enfermedad que estaba incubando lentamente que le producía debilidad y dolores de cabeza.

Su hijo Brandon Lee (1965-1993) falleció durante el rodaje de la película “El cuervo” abatido por unas balas que deberían haber sido de fogueo. Dicen que la escena no fue cortada al editar la película, de esa manera pasó a la categoría de “snuff movie”.

Existe la leyenda de una maldición según la cual cualquier compositor de sinfonías a partir de Ludwing van Beethoven (1770-1827), moriría poco después de escribir su novena sinfonía. Esos compositores víctimas de la maldición fueron además de Beethoven: Franz Schubert, Anton Bruckner, Antonín Dvorak, Gustav Mahler, Alezander Galzunov y Ralph Vaughan Williams.