DISTINTIVOS PARA LOS JUDÍOS EN LA EDAD MEDIA

En 1215, el IV Concilio de Letrán expuso lo siguiente: “Los judíos, tanto hombres como mujeres, en todos los países cristianos y en lugares públicos, deben distinguirse del resto de la población mediante un tipo especial de vestuario”.

Esta medida no era nueva. En 640, el califa Omar había obligado a los judíos y a los cristianos a llevar una cinta amarilla. Bajo el mandato de Harumal-Raschid en el 807 obligaba a llevar cualquier distintivo de ese color. En otros lugares era una placa metálica colgada al cuello, cascabeles en la ropa, cinturones exclusivos para ellos, capuchas de color miel, etc. Tenían prohibido llevar ropa de color verde ya que era el color del Profeta.

La recomendación de llevar el distintivo amarillo varió según el tiempo y el lugar. En el siglo XII, en Inglaterra era blanco y con la forma de las tablas de la ley. En Francia, en la misma época, eran redondos, amarillos y en el pecho y en la espalda, eso facilita la identificación de los judíos por delante y por detrás. En Maguncia, Alemania, debían llevar un llamativo sombrero con forma de cono, llamado "Judenhut".

                                  

No podían llevar armas, no podían ser soldados, ni abogados, no agricultores, no podían tener esclavos ni podían casarse con cristianos. Por esa razón la mayoría de judíos eran comerciantes, artesanos médicos, recaudadores de impuestos y prestamistas.

Lo que querían conseguir era diferenciar, en lo religioso a los creyentes de los no creyentes, la otra razón era por motivos fiscales ya que los cristianos y los judíos pagaban un impuesto de capitación o impuesto por cápita (impuesto por el cual toda persona pagaba la misma cantidad de dinero, independientemente de su renta o circunstancia).

Lo que perseguía el Concilio de Letrán era evitar las relaciones sexuales entre cristianos y judíos. De esta manera si se llegaban a realizar y eran “pillados”, no podrían alegar en su defensa que no sabían que estaban prohibidas y era pecado.