RELOJES PARA LOS LÍDERES

 

Al terminar la II Guerra Mundial, Suiza era uno de los países que celebró la victoria de las fuerzas aliadas contra la Alemania nazi. Un grupo de personajes de la sociedad suiza decidió agradecer a los principales comandantes en el conflicto, el obsequio era un reloj.

En el año 1945 se fabricaron cuatro relojes para Charles de Gaulle, Harry S. Truman, Stalin y Winston Churchill. Los relojes tenían que ser perfectos, con hora mundial y un diseño en esmalte cloisonné único, en el que simbolizara alguna característica de cada país y de cada líder.

Los encargados de fabricarlos fue la empresa Agassiz and Co., junto con Louis Cottier, que desempeñó la tarea de movimiento, diseños diales y grabados. La fecha límite para que los relojes estuvieran terminados era el 30 de noviembre de 1945. La idea era entregarlos en la Navidad de ese año.

La esfera de este espectacular reloj, que Churchill guardó durante toda su vida, también su familia después de su muerte en 1965, tenía la esfera decorada con la imagen de San Jorge matando al dragón, la aguja de las horas representaba un tridente como símbolo de la lucha de Inglaterra en la guerra. El reloj fue conocido como el “reloj Victoria” Cada uno de los relojes tenía su propio significado, el de Truman representaba la Estatua de la Libertad y la aguja era una rama de olivo, símbolo de la paz. El de Stalin, con un trabajador delante de la quema de plantas industriales, bajo los cielos tormentosos de Stalingrado, la aguja reflejaba la insignia comunista de la URSS. Churchill agradeció a través de la prensa este regalo.

El reloj de Churchill se subastó en la sede de Sotheby’s de Londres con un remate de 671 482 euros, comisiones incluida.

El reloj de Truman presentaba la Estatua de la Libertad y la aguja era una rama de olivo, símbolo de la paz. El de Stalin representaba un trabajador delante de la quema de plantas industriales, bajo los cielos tormentosos de Stalingrado, las agujas reflejaban la insignia comunista de la URSS.