LA BELLA OTERO

La mujer más admirada de los años 20 fue Agustina Otero Iglesias (1868-1965), conocida mundialmente como “La bella Otero”.

Nació en una familia humilde y sufrió una agresión sexual a los 11 años, eso impidió que tuviera hijos. En 1881 comenzó una carrera de éxito como bailarina de cafés.

En 1885, era una estrella internacional. Viajó por Europa, América y Rusia. Las dos cúpulas del hotel Carlton de Cannes, el más prestigioso de la ciudad, están inspiradas en los pechos de la bella Otero.

Reyes y emperadores la colmaban de regalos carísimos. Tuvo un collar de la reina María Antonieta y otro de la emperatriz María Eugenia de Montijo.

Alternaba momentos de pasión desenfrenada con otros de total indiferencia, la llamaban “la sirena de los suicidas”.

Al final de la Primera Guerra Mundial llegó su ocaso como bailarina. Retirada de la escena y la vida pública de forma voluntaria evitando que su recuerdo se marchitara.

Desde su retiro se entrego de lleno en su última pasión: el juego. Lo perdió todo. Murió como había nacido; en la más absoluta pobreza.