CURIOSIDADES DE GIACOMO CASANOVA

Giacomo Casanova (1725-1798) era un aventurero, alquimista, hombre de negocios, espía y famoso amante. Dependía de mecenas para mantener su lujoso estilo de vida lleno de buen vino, juegos de azar y bellas mujeres. También trabajó como soldado, bibliotecario y tahúr.

El gobierno veneciano, el oligárquico Consejo de los Diez, nombraba tres inquisidores del estado que empleaban a cientos de espías diseminados por toda Europa para velar por la seguridad de la ciudad.

Casanova trabajó para los inquisidores durante mucho tiempo, principalmente difundiendo rumores. Su espionaje en Dunquerque fue un acto muy comentado. El secretario de estado de la marina francesa consideró su informe muy preciso, hasta la perfección.

En 1755, fue condenado en Venecia a 5 años de cárcel acusado de brujería, consiguió huir a Francia. Allí contactó con un viejo amigo, el secretario de asuntos exteriores de Luis XIV, que le encargó que espiase los movimientos de los buques de guerra ingleses.

Después de vagar como exiliado por Europa durante 18 años, trató de reconciliarse con su ciudad natal, espiando en Roma para la inquisición veneciana. Consiguió el perdón y regresó a Venecia, donde se dedicó de nuevo a espiar para poder pagar los gastos de su lujosa vida.

Casanova pasó los últimos años de su vida en Bohemia, al frente de la biblioteca del conde de Waldstein. Allí escribió sus memorias, una de las mejores fuentes de información sobre etiqueta y costumbres en la Europa del siglo XVIII.