DESCRIPCIÓN DE CARLOS I DE ESPAÑA

Carlos I de España (1500-1558), era hijo de Juana I de Castilla y Felipe I de Castilla (Juana la Loca y Felipe el Hermoso), se casó con Isabel de Portugal. Tenía una estatura mediana, bien proporcionado, de frente amplia, color de piel pálida, nariz aguileña, ojos azules, de intensa mirada, su mayor defecto físico era la mandíbula inferior, porque tenía la dentadura tan desproporcionada con la de arriba, que los dientes no se encontraban nunca, eso hacía que hablara de manera rara, y que le costase trabajo comer con normalidad, al no poder masticar los alimentos.

De carácter difícil, con un gran sentimiento religioso, aumentado con los años, melancólico, amigo de la soledad, enemigo del buen humor, valiente soldado y de alma templada. Avaricioso, rencoroso, no le gustaba hacer favores. Poco inteligente, inepto para los idiomas, negado para las matemáticas. Flemático, algo indeciso, pacífico, moderado y aparentemente frío.

Le aterraban las arañas y las ratas. Apasionado del arte, de la música, de los relojes, de los mapas, de los instrumentos científicos y de los libros. Amaba los pájaros y las flores. Sobre todo llamaba la atención que siendo retardado, indeciso y pacífico, fuera capaz de montar en cólera hasta con el mismo rey de Francia.

Desde muy joven era dado a los excesos en la comida. Por la mañana, al despertarse, tomaba una escudilla de jugo de capón, con leche, azúcar y especias, después volvía a dormir. A mediodía comía una gran variedad de platos. A la una de la madrugada cenaba. Le encantaban los platos bien condimentados con pimienta y mostaza, la cerveza, los vinos del Rin.