17 de noviembre de 2009

ANÉMONA DE JARDÍN

El nombre anémona tiene un origen bastante controvertido. Comparando las transcripciones de algunos antiguos estudiosos, se puede decir que es sinónimo de fragilidad contra el viento, de caducidad, de belleza, pero también de muerte.

El misterio que envuelve todas las especies de anémonas (unas 80 o 100 especies), aumenta con el hecho de que los antiguos egipcios conocían ya estas flores como símbolo de enfermedad y los etruscos como emblema de luto.

Las primeras anémonas de la especie A. coronaria fueron introducidas en Europa de las tierras de Oriente y enseguida se tejieron leyendas y supersticiones sobre estas flores blanco-lila o violáceas. Las más hermosas extensiones de A. coronaria se encuentran junto a las necrópolis etruscas, en Tarquinia.

En el lenguaje de las flores, la anémona tiene el significado de abandono. Por esta razón en el siglo XIX el envió de un ramo de anémonas equivalía a un mensaje de adiós.

La especie “anemone vulgaris”, tiene propiedades medicinales, es muy efectiva para los dolores menstruales, dolores del sistema reproductivo tanto femenino como masculino, los trastornos urinarios y para el dolor de oídos. Se utilizan las partes secas, pues la planta fresca es muy tóxica.

0 comentarios :