SPANISH AEROCAR
El transbordador que lleva a los turistas sobre las aguas del Niágara, cuyo nombre es “Spanish Aerocar”, también conocido como “Tranvía aéreo”, fue abierto al público en 1916, recorriendo casi 540 metros de longitud sorteando un abismo sobre el Niágara. El inventor fue Leonardo Torres Quevedo y la compañía constructora estaba ubicada en Canadá con elementos y capital español. Fue diseñado y construido en España, más tarde, se transportó y se montó en América.
Este vehículo esta propulsado por un motor eléctrico que cuenta con el apoyo de un motor diésel de emergencia, por si hubiera cortes en el suministro eléctrico. También cuenta con un vehículo de rescate para emergencias, nunca ha sido necesario utilizarlo.
Seis cables de acero entrelazado, de una pulgada de diámetro, sostienen todo el sistema. La altura del conjunto en su punto central sobre el remolino es de 61 metros, colgando entre dos estructuras que se encuentran situadas en territorio canadiense, a lo largo del viaje se cruza la frontera con los Estados Unidos en varias ocasiones.
En un extremo de la línea, los seis cables en suspensión están unidos a una estructura de hormigón de más de 700 toneladas. En el otro extremo, los cables, se encuentran libres pasando por una enorme polea y con unos contrapesos de 10 toneladas. La barquilla pesa unas tres toneladas y puede llevar hasta 35 pasajeros. Desde hace un siglo, el transbordador realiza unos veinte viajes entre las orillas, con una duración de diez minutos.
Las dos estaciones, Punta Thompson y Punta Colt, se encuentran a 76 metros sobre el nivel del río. Gracias a los contrapesos móviles, la energía de tracción por los cables, es siempre la misma. El sistema de soporte, con un curioso mecanismo de contrapesos, evita que haya problemas en atravesar el abismo, incluso en caso de que los cables se rompan.
0 comentarios :
Publicar un comentario