EL REALISMO Y SUS PEINADOS
El Realismo fue un movimiento artístico y literario, su finalidad era la representación objetiva de la realidad, para ello se basaban en observar los aspectos cotidianos que ofrecía la vida. Duró entre 1848 y 1900. Con la revolución industrial, la mujer se incorporó al trabajo, por esa razón sus vestidos y peinados tenían que ser lo más cómodos posibles.
Desde mediados de 1850 rigen en Europa reyes y emperadores. Nace una nueva clase social, la nobleza del dinero, que exagerando la ostentación y el lujo intentaba igualarse, y en ocasiones sobrepasar, a la nobleza por herencia. Los peinados de las señoras, en esa época, eran con raya en medio, el pelo lacio se peinaba ancho y cubriendo las orejas con un arco muy suave hacia atrás, terminando en un chignon (moño en la nuca) ajustado bajo. Los lados de la cabeza estaban muy acentuados por los rulos de palo, herencia del Romanticismo.
A finales de 1860, el moño se desplazó hacia arriba, poniéndose de moda los trenzados amplios, los rizos, las ondas y los cardados, haciendo peinados más abultados. También estaba de moda recoger el cabello y ajustarlo arriba, dejando las orejas visibles, de esa manera se apreciaban más las joyas.
En 1870, los peinados son naturales y sencillos. Los postizos no se utilizan mucho, pero el teñido se sigue usando muchísimo. El cabello teñido de rojo era considerado ordinario e indecente. También estaban muy mal visto, el rojo en los labios y mejillas, así como pintarse las cejas. Lo más adecuado era un poco de polvos para dar un leve toque de color. Los hombres lucían barba, muy bien recortada.
0 comentarios :
Publicar un comentario