MARGARITA DE VALOIS

Margarita de Valois, reina de Francia y Navarra, no era tímida con los hombres. Con su tez clara, sus labios carnosos y sus mejillas redondeadas, no se la consideraba solamente guapa, sino toda una belleza.

También se le atribuyeron abortos hijos bastardos a los que habría abandonado. Se cuentan historias inverosímiles, como un incesto con sus tres hermanos, un ménage a trois con su carcelero y su esposa. Se decía que llevaba cosidos a la falda unos bolsillos con los corazones embalsamados de sus amantes muertos.

Tuvo infinidad de amantes o amores:

A los 17 años se enamoró de Enrique de Guisa, aunque a pesar de los rumores parece ser que no pasó de un amor platónico, (las princesas solteras estaban muy vigiladas). A Enrique le habría interesado casarse con ella, pero no la buscó como amante. Murió asesinado por razones políticas.

Se conservan los versos que D’Ambroise le dedicó a Margot, pero la aventura con otra mujer acabó con su vida. Un marido despechado le preparó una emboscada.

El gran amor de Margot fue Jacques de Harlay, señor de Champvallon que era el caballerizo mayor de Alençon. El romance escandalizó. La reina tuvo que abandonar Paris y nunca volvieron a verse.

El joven D’Aubiac fue el primero de sus amores maduros. Él tenía solamente 16 años cuando subió a Margot a la grupa de su caballo, y la ayudó al huir de la revuelta de Agen. Ella le doblaba la edad.