CONCIERTO DE AÑO NUEVO

El primer concierto de Año Nuevo se celebró en el año 1939, no se celebró el 1 de enero sino el 31 de diciembre, también fue en Viena. Este primer concierto, dirigido por Clemens Krauss, tenía como objetivo la difusión de la música austriaca para sobresalir frente a la música alemana. Se interpretaron obras de Johan Strauss (hijo).

El siguiente concierto de Año Nuevo se celebró en 1941. En el año 1945 se interrumpió a causa de la II Guerra Mundial. En el año 1958, el director Willi Boskovky introdujo la tradición de terminar con el Danubio Azul y la Marcha Radetzky.

Siempre se ha celebrado en el mismo lugar, la Sala Dorada de la Musikverein de Viena. Siempre ha sido interpretado por la Orquesta Filarmónica de Viena, es muy difícil entrar en ella, sus miembros se eligen de la Orquesta de la Ópera Estatal de Viena.

El repertorio siempre se centra en las obras de la familia Strauss: Johann Strauss padre e hijo, Eduard Strauss y Josef Strauss. En ocasiones se han interpretado piezas de Mozart y de otros virtuosos.

Hasta 1987 el director siempre era el mismo hasta que se jubilaba o fallecía. Desde ese año, la batuta pasa de unos a otros directores: Claudio Abbado, Zubin Mehta, Daniel Baremboin, Herbert von Karajan, etc.

La Marcha Radetzky se ha convertido en un símbolo, el público participa siguiendo con las palmas el ritmo que marca el director. Esta marcha es una composición de Johann Strauss padre, compuesta en el año 1848. Se considera un símbolo revolucionario. En el año 2005 no se interpretó en solidaridad con las víctimas del tsunami del Océano Índico que tuvo lugar en el año 2004.

Las entradas se sortean, las solicitudes se pueden presentar del 2 al 23 de enero en la página web de la Filarmónica de Viena. Si la suerte acompaña, al año siguiente se puede elegir asistir al concierto de Año Nuevo, al de San Silvestre o al ensayo general. El precio varía desde los 30 euros a los 940 euros para el concierto del 1 de enero, o entre 130 y 380 para el ensayo general.