LAS NAUMAQUIAS

En la época romana se llamaba naumaquias a las representaciones de batallas navales célebres, simuladas sobre lagos artificiales, creados para la ocasión.

En ellas, los barcos maniobraban, los remeros bogaban y como punto final, los combatientes, (que eran prisioneros o criminales condenados a muerte), se debatían cuerpo a cuerpo, sobre las cubiertas, fingiendo operaciones de abordaje y asalto. Guardias pretorianos vigilaban para evitar intentos de fuga.

El coste de estos espectáculos era muy elevado, por el derroche material y humano, donde, hasta el agua debía llegar para la ocasión. El Coliseo, ubicado en un antiguo estanque de los jardines de Nerón, fue escenario, con motivo de su inauguración en el año 80, de una gran naumaquia evocando la guerra entre Corinto y Corcira. Domiciano ofreció allí otra batalla naval antes de excavarse todo el sistema de galerías subterráneas bajo la arena.

La más memorable fue la de Claudio en el lago Fucino, estaba compuesta por 50 embarcaciones y se destinaron 19.000 prisioneros.