CALENDARIO LUNAR
Estos calendarios utilizan los sistemas que miden el tiempo tomando como base los ciclos de la luna. Todos los calendarios de la antigüedad, excepto el egipcio, se elaboraron según este principio.
El empleo de este calendario tiene varios inconvenientes. En primer lugar, la desigual duración del ciclo lunar, que tiene un valor medio de 29 días, 12 horas, 44 minutos y 2,8 segundos, por lo cual si los meses de los calendarios lunares fueran rigurosamente equivalentes a las lunaciones, no contendrían un número exacto de días. Para eliminar esta complicación, los astrónomos mesopotámicos implantaron un año formado por 12 meses que podían constar de 29 o 30 días.
El segundo inconveniente es su inadecuación al ciclo de las estacioes que resulta de la diferencia de 11,25 días existente entre el número de días del año trópico (365,24) y el número de días de cualquiera de los calendarios lunares de la antigüedad (mesopotámico, júdio, griego, primitivo...). La consecuencia es que cada tres años todos los meses lunares se retrasaban una posición del ciclo estacional, y al cabo de 36 años cualquier mes había correspondido sucesivamente a la primaver, verano, otoño e invierno.
Para los agricultores era un caos, por esp buscaron métodos para adecuar los meses del ciclo lunar al ciclo de las estaciones. Los primeros intentos fueron añadir periódicamente un mes suplementario (calendarios mesopotámico y júdio).
Otras soluciones más complicadas se dieron en Grecia mediante la búsqueda de intervalos de tiempo constituidos por cierto número de de años trópicos, que se suponía equivalentes a un número exacto de lunaciones. De este modo se pretendía que a lo largo de cada uno de estos intervalos llamados ciclos, las fases de la luna se repitieran siempre en los mismos días.
Fueron propuestos varios ciclos que se diferenciaban por su duración y por la repartición de los meses y los días, cada uno de los cuales se distingue con el nombre de su autor; ciclo de Metón, de Calipo, de Hiparco, etc.
6 comentarios :
el calendario arabe es lunar; mientras que el nuestro es solar.
El año fundacional arabe fué el 622 d.C. (año de la Hégira).
La diferencia entre ambos calendarios hace que no sea tan sencillo calcular la equivalencia entre el año hégira y el año cristiano.Lo cómodo sería sumar al año hégira el 622 pero no es así.
Una forma de calcular es esta: restar el 3% del año hégira al mismo número y entonces si, sumar 622.
Ejemplo: año hégira 325.
3% de 325: 9,75.
Se redondea en este caso hacia arriba: 10 (si hubiera sido 9,49 se redondearía hacía abajo; 9)
325-10; 315
315+622: 937
325 hégira: 937 d.C
saludos
Carlos
Carlos, gracias por la información. Un beso.
¡Oh dios mío! esta información me ha sido de gran ayuda en un trabajo muy importante para mi carrera, mil gracias Ana.
¡Felicidades por el blog!
Un beso.
Anónimo no sabes cuánto me alegro de que te haya ido fenomenal el trabajo, gracias a ti. Un beso.
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