LAS PRIMERAS BIBLIOTECAS

Las primeras bibliotecas surgieron en las culturas del Mediterráneo Oriental y nacieron con el objeto de preservar los textos jurídicos y religiosos necesarios para la vida de la comunidad.

El emperador chino Kao-Ti (milenio-II), fundador de la dinastía Han, llegó a juntar una biblioteca de 10.000 manuscritos, y por las descripciones de Diodoro Sículo, se sabe que la mayor biblioteca que existió en Oriente fue la de Osimandías (siglo XIII).

En la Grecia clásica las bibliotecas tuvieron un carácter distinto, orientadas a la conservación de la cultura. Con la conquista de Grecia por Roma, gran parte de los fondos de las bibliotecas griegas pasaron a manos de los romanos. Julio César encargó a Terencio Varrón la creación de la primera biblioteca pública romana, proyecto que no fue llevado a la práctica hasta el año 39 por Asinio Polión.

Augusto fundó las bibliotecas Octaviana y Palatina, y bajo el Imperio llegó a haber en Roma hasta 28 bibliotecas públicas, entre ellas la Ulpiana (siglo II) fundada por Trajano. La primera biblioteca cristiana la fundó en Jerusalén el obispo Alejandro en 212.

Mientras en Oriente florecía la biblioteca de Constantinopla, en Occidente los únicos focos de irradiación cultural eran los monasterios. Estos, crearon sus colecciones de manuscritos.

En la España musulmana se crearon múltiples bibliotecas, donde destacó la del califa al-Hakam (siglo X) en Córdoba que llegó a contar con 400.000 volúmenes, procedentes de las bibliotecas privadas de los antepasados del califa y de las adquisiciones que conseguían sus funcionarios por todo el mundo islámico.

En el Renacimiento, con el triunfo del humanismo, fomentó la afición por la lectura. Los nobles crearon en sus residencias ricas bibliotecas privadas y luego, con el afianzamiento de las monarquías, surgieron las bibliotecas reales.

Con la difusión de la imprenta se multiplicaron las bibliotecas privadas y se fundaron otras municipales y estatales o por iniciativa de diversas entidades e instituciones culturales y sociales.