EL ANILLO DE EDUARDO EL CONFESOR
Desde 1549 hasta la actualidad, todos los reyes o reinas británicos han lucido “el anillo de Eduardo el Confesor”, como símbolo de su investidura. Los únicos reyes que no lo emplearon y llevaron otro a cambio fueron la Reina Victoria y el rey Guillermo IV.
El anillo de Eduardo el Confesor tiene leyenda. Se trata de una joya realizada en oro con un gran rubí plano en la parte superior, en el que se encuentra grabada la cruz de San Jorge. La leyenda cuenta que un día un anciano leyó la palma de la mano del rey Eduardo, pero como éste no llevaba dinero con que pagarle se quitó el anillo y se lo regaló.
Tiempo después, dos peregrinos que iban hacia Palestina recibieron la sortija de manos del anciano, que no era otro que San Juan, el cual se lo entregó para que se lo devolvieran al rey, y en señal de agradecimiento por su generosidad, le hizo llegar la promesa de una ayuda divina para él y sus sucesores.
Eso es lo que motivó que este anillo se emplee siempre en Inglaterra para las coronaciones, ya que se cree que con él la reina o el rey recibirán también ayuda divina para cumplir correctamente su mandato. El que se usa actualmente es una copia de aquél.
También se dice que en la actual corona, en la parte superior, se encuentra el zafiro autentico.
El anillo de Eduardo el Confesor tiene leyenda. Se trata de una joya realizada en oro con un gran rubí plano en la parte superior, en el que se encuentra grabada la cruz de San Jorge. La leyenda cuenta que un día un anciano leyó la palma de la mano del rey Eduardo, pero como éste no llevaba dinero con que pagarle se quitó el anillo y se lo regaló.
Tiempo después, dos peregrinos que iban hacia Palestina recibieron la sortija de manos del anciano, que no era otro que San Juan, el cual se lo entregó para que se lo devolvieran al rey, y en señal de agradecimiento por su generosidad, le hizo llegar la promesa de una ayuda divina para él y sus sucesores.
Eso es lo que motivó que este anillo se emplee siempre en Inglaterra para las coronaciones, ya que se cree que con él la reina o el rey recibirán también ayuda divina para cumplir correctamente su mandato. El que se usa actualmente es una copia de aquél.
También se dice que en la actual corona, en la parte superior, se encuentra el zafiro autentico.
2 comentarios :
A la reina Isabel II no parece haberle traido mucha suerte este anillo, al menos, en cuanto a lo que se refiere a su familia y todo lo que, hasta ahora, está aconteciendo con ella.
Un beso de viernes.
Pepa.
Pepa, a lo mejor no lo llevaba puesto, porque desde luego toda la familia es rara, rara.
Un beso y buen finde.
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