13 de mayo de 2017

LA MEDICINA EN EL ANTIGUO EGIPTO (2)


En el Antiguo Egipto aparecieron los primeros médicos. Imhotep era considerado como el primer gran médico, en el 260 a. C., diagnosticó más de 200 enfermedades y prescribió sus correspondientes tratamientos. Era tan influyente que cuando murió pasó a ser adorado como un dios.

Para los egipcios los tratamientos como los analgésicos y la limpieza de heridas eran tan eficaces como rezar a los dioses, era frecuente que los médicos atendieran acompañados de un brujo que era el encargado de realizar los conjuros para aumentar la eficacia de los tratamientos y aumentar las probabilidades de éxito.

Los médicos egipcios hicieron importantes descubrimientos sobre el cuerpo humano. Sabían que el corazón, el pulso, la sangre y el aire eran importantes para la salud. Por ejemplo, si el pulso era débil, significaba que el paciente tenía problemas graves. Entre las intervenciones que realizaban destacan la limpieza de heridas, el arreglo de huesos rotos y la amputación de miembros.

El material quirúrgico fue mejorando la calidad gracias a los conocimientos de anatomía que habían adquirido en los procesos de momificación. Los egipcios no conocían la anestesia, así que los pacientes solían estar conscientes durante las operaciones. Los remedios con propiedades médicas estaban recogidos en papiros que incluían las instrucciones para prepararlos.

La mayoría de ellos tenían asistentes encargados de inmovilizar al paciente y de facilitar el instrumental. Los asistentes también gozaban de mucho prestigio social.


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