EL UNIANIMAL DEL ARCA DE NOÉ
Entre los animales que parece que había en el Arca de Noé, dice la leyenda que se encontraba una especie fantástica, se trata del unianimal, también conocido por como unifalol. Esta bestia se encontraba entre los demás animales del Arca y destacaba de los demás porque era el único que siendo pareja era al mismo tiempo uno solo.
Este animal tenía ojos de Pantocrátor románico, cuernos como los de Lucifer, cortos y curvos, labios de arcángel y una barbilla que rascaba más que las órtigas. Su característica principal era su pene largo y flexible que al alargarse se duplicaba de tamaño y era capaz de penetrar en la vagina que el unianimal poseía en la parte derecha de su cuerpo, con lo que podía copular con el mismo. Se dice que sus vísceras olían a incienso y maitines.
En algunos textos pícaros de la Edad Media se dice que el unianimal fue utilizado sexualmente por la práctica totalidad de personas y animales del Arca. En la obra Tratado de monstruos y seres de horror se dice que “no sólo servíase a sí mismo, por otra entrada aparte de la de su órgano femenino, sino que además servía a otros por la puerta trasera, y su presencia era requerida para aliviar necesitados de holganza”.
Santa Teresa de Jesús escribió sobre este animal en su libro Veinte Moradas, pero Fray Juan de Toledo lo censuró y las dejó en solo veinte.
Cuenta la leyenda que el primer duque de Alba regaló a Isabel, la esposa de Carlos V, una medalla con la imagen del unianimal. Isabel llevaba el medallón al cuello cuando murió y dicen que éste fue el verdadero motivo que llevó a pronunciar al duque de Gandía la frase: “No serviré a ninguna reina que se corrompa hasta ser irreconocible”.
0 comentarios :
Publicar un comentario