LA LEYENDA DE ISIS Y OSIRIS
Hijo de Geb, la Tierra, y de Nut, el Cielo, Osiris se casó con su hermana Isis y se convirtió en faraón de Egipto. Este gobernante justo enseñó a los hombres a cultivar la tierra y a fabricar el pan y el vino. Egipto llegó a ser un país próspero, pero el hermano de Osiris, el dios Seth, sentía celos de él.
Al volver Osiris de un largo viaje, Seth y sus cómplices organizan una fiesta en su honor, durante el banquete, Seth ordena traer un cofre que él había hecho fabricar, la propuesta es ofrecérselo a quien pueda introducirse dentro. Cuando Osiris penetra en su interior, Seth cierra la tapa y manda arrojarlo al Nilo. En lugar de hundirse en el río, el cofre flota a la deriva, llevado por la corriente y va a parar al Mediterráneo.
Isis, su esposa, parte en busca de su marido para darle una sepultura digna de un rey y halla su cuerpo en el puerto de Biblos, Seth al enterarse de la noticia se apodera del cuerpo de su hermano y lo corta en pedazos, que dispersa después. Movida por su amor, Isis reúne los fragmentos y, con la ayuda de Anubis, embalsama el cuerpo. Osiris recobra la vida, pero a partir de entonces ya no reinará en la tierra, sino en el reino de los muertos.
Seth sucede a su hermano a la cabeza de Egipto, sin saber que Osiris e Isis tuvieron un hijo Horus. Su madre oculta su existencia hasta que crece y es lo bastante fuerte para vengar el asesinato de su padre.
Horus pide al tribunal de los dioses, presidido por Ra, heredar el trono de su padre. El dios de la cabeza de ibis, Thot, defiende a Horus, pero Ra se pone de lado de Seth, quien por la noche le ayuda a luchar contra Apopis, (una terrible serpiente). Isis desea intervenir en favor de su hijo, pero Seth se lo prohíbe, ella burla la prohibición gracias a un complicado ardid, y logra que el tribunal se decante en favor de Horus, que finalmente se convierte en rey de Egipto, al igual que su padre.
Seth no acepta el juicio de los dioses y hace que él y Horus sean convertidos en hipopótamos, y sentencia: "El que permanezca tres meses bajo las aguas del Nilo será rey".
Isis hiere con un arpón a Seth, y Horus es reconocido rey. A partir de entonces, Ra confía a seth la tarea de ahuyentar a los malos espíritus.
Al volver Osiris de un largo viaje, Seth y sus cómplices organizan una fiesta en su honor, durante el banquete, Seth ordena traer un cofre que él había hecho fabricar, la propuesta es ofrecérselo a quien pueda introducirse dentro. Cuando Osiris penetra en su interior, Seth cierra la tapa y manda arrojarlo al Nilo. En lugar de hundirse en el río, el cofre flota a la deriva, llevado por la corriente y va a parar al Mediterráneo.
Isis, su esposa, parte en busca de su marido para darle una sepultura digna de un rey y halla su cuerpo en el puerto de Biblos, Seth al enterarse de la noticia se apodera del cuerpo de su hermano y lo corta en pedazos, que dispersa después. Movida por su amor, Isis reúne los fragmentos y, con la ayuda de Anubis, embalsama el cuerpo. Osiris recobra la vida, pero a partir de entonces ya no reinará en la tierra, sino en el reino de los muertos.
Seth sucede a su hermano a la cabeza de Egipto, sin saber que Osiris e Isis tuvieron un hijo Horus. Su madre oculta su existencia hasta que crece y es lo bastante fuerte para vengar el asesinato de su padre.
Horus pide al tribunal de los dioses, presidido por Ra, heredar el trono de su padre. El dios de la cabeza de ibis, Thot, defiende a Horus, pero Ra se pone de lado de Seth, quien por la noche le ayuda a luchar contra Apopis, (una terrible serpiente). Isis desea intervenir en favor de su hijo, pero Seth se lo prohíbe, ella burla la prohibición gracias a un complicado ardid, y logra que el tribunal se decante en favor de Horus, que finalmente se convierte en rey de Egipto, al igual que su padre.
Seth no acepta el juicio de los dioses y hace que él y Horus sean convertidos en hipopótamos, y sentencia: "El que permanezca tres meses bajo las aguas del Nilo será rey".
Isis hiere con un arpón a Seth, y Horus es reconocido rey. A partir de entonces, Ra confía a seth la tarea de ahuyentar a los malos espíritus.
4 comentarios :
Son fantásticos tus post...se los estoy sacando por impresora a mi hijo pequeño. Le encanta el mundo del Antiguo Egipto.
Te deseo una feliz navidad, llena de paz y tranquilidad.
Un besazo, Adela
Vamos a aprender del Antiguo Egipto lo que algún día deberiamos haber aprendido.
Ana te deseo una muy feliz Navidad y que el próximo año nos sigas deleitando con tus post. Un beso, Valentín
Adela, muchas gracias por tus comentarios y otra vez te deseo Feliz Navidad. Un beso.
Valentín muchas gracias y si me pongo pesada con tanto Antiguo Egipto me lo decis. Un beso y Feliz Navidad.
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