11 de octubre de 2007

CANDADO Y LLAVE



El adolescente ha vuelto al ataque.

A principio de curso, un día vino con la noticia de que en el colegio podían alquilar una taquilla, para guardar los libros y no venir cargado cada día con todo.

Después de dar el coñazo durante unos días, su madre le dijo que sí, no sin antes preguntarle si sería responsable con la llave. Por supuesto su respuesta fue que sí. El candado también fue un problema, tenía que ser de doble cierre.

Por fin se la dieron y durante unas semanas todo ha ido bien, hasta el viernes pasado;

Viernes se deja la llave dentro de la taquilla con todos los libros y el móvil.

Lunes se deja el libro para estudiar un control al día siguiente dentro de la taquilla.

Martes se vuelve a dejar la llave dentro.

Miércoles se deja la llave de repuesto en clase.

Y llegamos a hoy viernes otra vez, llega del cole, se quita el cordón donde la lleva la llave colgada al cuello, y el cordón esta, la llave no.

En una semana le ha pasado de todo, no sé si es su semana de mala suerte, o lo mejor será que no tenga taquilla.

Pobrecito, ya no sabe dónde meterse.

4 comentarios :

enrique DICE

Pues me parece de lo más normal....
Es, un adolescente...
Etapa de la vida que todos hemos pasado y que nos convierte en seres extraños.
Y más los de ahora, que son y serán niños raros, adolescentes raros, jóvenes raros y adultos raros...
Los nuevos tiempos, querida ana, que no siempre son mejores...

Ray Rudilla DICE

Pragmatismo.
Durante una semana, que cargue con los libros sin derecho a taquilla. Durante otra, que cargue con los libros y la llave y a la semana siguiente que elija.
Besos cordiales

Ana DICE

Enrique, sí que son raros, muy raros.

Aunque en mi adolescencia también me pasaron cosas raras, supongo que como a todos. Un beso.

Ana DICE

Ray, eres un poco duro con el chico, o es que yo soy muy blanda, creo que por eso nunca seré madre, soy demasiado permisiva y sería una madre nefasta. Un beso.