EL LIBRO DE LOS MUERTOS

El Libro de los Muertos, conocido por los egipcios, como "Formulas para Salir al Día", es una colección de invocaciones, plegarias, prácticas mágicas ceremonias, purificadoras y especulaciones teológicas de todo tipo, cuya función era por un lado en ayudar al difunto en su tránsito de la vida a la muerte, y por otro dotar al espíritu de la posibilidad de "salir durante el día" de la tumba para seguir disfrutando de los bienes ofrecidos por el mundo exterior.

Las formulas que lo componen, no son fruto de un momento dado o de un personaje concreto, (aunque se dice que su autoría la tiene el dios Thot), sino que fueron recopiladas por los sacerdotes en épocas distintas, teniendo como origen los mismos hechizos que en tiempos pasados habían utilizado durante el proceso de momificación del propio Osiris.

Originariamente eran transmitidos por los sacerdotes, solo de forma verbal, y en la mitad del Reino Antiguo, comenzaron a grabarse de manera permanente sobre las paredes interiores de las pirámides de diversos Reyes.

A partir de la VII dinastía y hasta el Reino Medio se produjeron cambios y se empezaron a grabar sobre los ataúdes o sarcófagos donde reposaban los cuerpos momificados, además de emplearlos para los Reyes y Reinas se hizo extensivo a los nobles y funcionarios de alto rango, entonces se llamaron "Textos de los Sarcófagos".

Terminaron siendo copiados sobre papiros o lienzos de lino, los cuales una vez enrollados se ponían cerca de los cadáveres, normalmente, entre las piernas. Los capítulos guardan una estructura fija y general compuesta por; un título, el texto propiamente dicho, y un añadido o rúbrica. El tipo de notación empleado en la confección de los textos, al principio fue la escritura jeroglífica, más tarde se fue alternando con el empleo de la escritura hierática.

Parece ser que cada persona escogía el contenido que deseaba integrar en la obra, porque ninguno de los ejemplares encontrados tienen los mismos capítulos. De los ejemplares encontrados, son muy variados, ya que tienen longitudes que van desde los 25 cm de texto el más simple, hasta los 58 mts. y con ilustraciones el más completo. Entre los más famosos destacan por su longitud; el "Papiro de Ani", de 24 mts, y el "Papiro de Yeufanj" de 19 mts. Los más antiguos; el "Papiro de Yeuya", "Papiro Ja" y el "Papiro Nu".