PEREJIL
El origen del perejil se encuentra en la isla de Cerdeña, desde donde se extendió a todos los países del Mediterráneo. Es una de las hierbas más conocidas que existen. El nombre procede del griego “petrol”, que significa “piedra”, la razón es que crece entre y alrededor de las rocas.
Para los romanos, el perejil era el símbolo de la muerte y se dispersaba sobre las tumbas. Los gladiadores lo empleaban para ser más fuertes y astutos. Plinio cuenta que todas las salsas contenían perejil.
Entre los griegos significaba alegría, fiesta, nacimiento y resurrección, colocaban ramos de perejil sobre las tumbas para honrar a los difuntos. En la Iliada aparecen referencias del perejil, ya que la isla mágica de la ninfa Calipso estaba cubierta por una alfombra de perejil, cuyo poder afrodisíaco empleó la ninfa para seducir a Ulises y retenerlo a su lado durante muchos años.
En la Edad Media se asociaba al perejil con poderes mágicos, creían que si mientras se arrancaba de raíz y diciendo el nombre del enemigo, éste moría de inmediato.
Hay multitud de leyendas en torno al perejil; dicen que regalarlo atrae la mala suerte. Para evitar las malas vibraciones se debe plantar en Jueves Santo y ofrece un ramito a San Pancracio para atraer el dinero.
Se cuenta también que San Francisco de Asís se encontraba enfermo y sin apetito y le preguntaron: “¿Qué le gustaría comer, padre?” Y el respondió: “Si tuviera perejil intentaría comer un trozo de pan con él”. Dicen que con un poco que tomo desaparecieron sus nauseas, producidas por la anemia que padecía.
Durante más de 2.000 años, el perejil ha sido considerado como una hierba medicinal que tiene efectos calmantes y diuréticos. Fortalece el sistema digestivo y descongestiona el hígado. Afecciones de las vías respiratorias como tos, bronquitis. Favorece la menstruación. Es considerado afrodisíaco. Inapetencia, anemia, agotamiento físico.
Las mujeres embarazadas deben evitar consumir perejil de forma abundante, por tener cierto efecto oxitócico, contrae el utero y podría ser abortivo.
2 comentarios :
Muy interesante también la entrada de hoy, Ana. Cuenta Robert Graves en sus "Mitos griegos II" que de perejil eran las coronas de los vencedores en los juegos de Nemea, instituidos en honor de Ofeltes, llamado después "Arquémoro" (el Comienzo del Destino). Un oráculo había ordenado no poner nunca al niño en el suelo antes de que supiese andar; cuando en el episodio de Los siete contra Tebas Polinices y sus compañeros llegan a Nemea, preguntan dónde pueden hallar una fuente para beber a Hipsípila, la encargada de cuidar del pequeño Ofeltes, esta dejó al niño en el suelo, junto a la fuente, donde una serpiente se lanzó contra él y lo ahogó. Y la casualidad hizo que la vegetación sobre la que murió Ofeltes fuese el perejil, o en su defecto el apio, que para eso son parientes.
Espero haber aportado una pizca más de ... perejil a tu post.
Un saludo.
Profedegiego, gracias por tu perejil en mi "salsa". Un beso.
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