LOS TURISTAS
Ahora que ha terminado el verano y no quedan turistas, la ciudad está vacía, no es que seamos pocos es que no vemos atuendos raros por las calles.
Sí, la mayoría de ellos, llevan cosas que yo creo que en sus países debe estar prohibido utilizar, y aprovechan para ponérselas aquí, que se deben creer que no tenemos gusto, aunque claro, nuestro carácter, es del "vive y deja vivir", pues por mucho que nos topemos de frente con el mismísimo Rey de España, ni caso.
La cuestión es que los turistas, sobre todo los extranjeros, tienen una forma de vestir y ser muy peculiar. Podríamos destacar las sandalias o chanclas con calcetines largos, digo yo si no les dará igual quitarse los calcetines o porque no se los ponen cortos, que irán más livianos.
Otra modalidad es la de ir con bañador o biquini por la calle, que tenía entendido que estaba prohibido, pero se ve que no. Da igual si son hombres o mujeres, gordos o delgados, ellos se cuelgan su cámara de fotos y en bañador.
Otra cosa que me llama la atención es porque se ponen tan rojos, son muy blancos, si lo sé, pero yo también y no parece que me va a saltar la piel. Encima cuando están como gambas se vuelven a poner al sol, eso si vestidos. Cuando el día está nublado se van a visitar la ciudad, lo que no se es si hace sol los días que pasan aquí, ¿no deben visitarla?
Van a la playa cargados como burros, colchonetas, cocodrilos de goma, careta y aletas de bucear, pelotas, palas, discos voladores. Yo creo que nada más bajar del avión, lo primero que hacen es parar en algún souvenir a equiparse.
Luego están los que vienen a beber durante todo el día en la playa, que no sé cómo no les da algo, borrachos a pleno sol, pero eso suele ser gente joven que imagino que no deben poder hacerlo en sus países. Estos incluso es fácil verlos en las playas de noche, practicando juegos sexuales (que discreta soy), en la arena.
Pero a pesar de eso, en parte tenemos que estar agradecidos al turismo, porque gracias a eso, vivimos muchos de nosotros. Y además de paso practicamos idiomas, por lo menos a nivel conversación.
2 comentarios :
Qué sandalias y qué calcetines... me recuerdan a los que me dieron en la mili...
¿Y los ves folando en la playa?
Sí, se les ve, vas caminado por el paseo por el borde de la playa y los ves, aunque no quieras mirar. Un beso.
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