EL TERROR DE LOS TOBILLOS
En el año 1970, al fútbol español llegaron muchos jugadores
sudamericanos con pasaporte español, ya que eran descendientes directos de
españoles. Junto a los auténticos, llegaron algunos que decían que sus
antepasados eran de “Celta de Vigo”, uno de ellos era el jugador argentino
Miguel ángel Adorno.
Tres jugadores con distinto apellido eran falsos hijos de un
mismo padre, un emigrante que por cuatro dólares reconoció a cualquier hijo
como suyo.
Uno de estos casos fue el del jugador argentino Ramón Aguirre Suárez, conocido como el terror de los tobillos, por la dureza que empleaba en su juego.
El entrenador del Granada, Bernardino Pérez, lo recogió del aeropuerto y
durante todo el trayecto le fue dando información sobre sus orígenes: “Tu padre
es de Pamplona”. Se lo repitió cien veces y se lo hizo repetir a él para
comprobar que se acordaría en el momento de decirlo.
Llegado el momento de la rueda de prensa de presentación del
nuevo jugador, un periodista le dijo: -Así que su padre es navarro. Él contesto:
-De navarro nada; de Pamplona.
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