6 de enero de 2019

CAZADORES DE BRUJAS


-Felipe Adolfo von Ehrenberg, obispo de Wurzburgo, fue un poderoso hombre de la Baja Franconia, en el sur de la actual Alemania. Máximo enemigo de los protestantes, su fervor por la aniquilación de la brujería solo era comparable a su interés de recuperar la católica Baviera.

En 1620 su odio se centró en las brujas de su jurisdicción. Nadie estaba a salvo, por sus juicios masivos pasaron tantos campesinos como nobles. Durante los ocho años de su reinado, más de 900 personas murieron en la hoguera, entre ellas devotos sacerdotes, su propio sobrino, incluso niños de tan solo tres años acusados de fornicar con el demonio.

-Matthew Hopkins, autoproclamado “general cazador de brujas”, fue un hostigador que ejerció su poder de 1644 a 1647. Durante ese período de tiempo fue responsable de la muerte de más de 300 mujeres. Introdujo muchas pruebas que resultaron cómicas si no fuera por sus espantosas consecuencias. Aunque el Parlamento le permitía esas prácticas, enseguida tuvo muy mala fama por los métodos que utilizaba.

Después de su muerte, la leyenda de su propia maldad le convirtió en el más temido y odiado, pero su autentico legado fue su tratado “El descubrimiento de las brujas” que fue muy popular en las colonias americanas de la época, sobre todo en la comunidad de Salem.

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