10 de noviembre de 2015

EMPERADORES HISPANOS (2)



Publio Elio Adriano (76 d. C.-138 d. C.), nació en Itálica, quedó huérfano a los diez años y fue trasladado a Roma para vivir con su tío Trajano, quien le dio una exquisita educación. De pequeño le gustaba todo lo relacionado con las bellas artes, y la sabiduría. Aprendió matemáticas, medicina, filosofía, música, literatura, escultura, geometría, etc. Gracias a su inclinación por el mundo helenístico, se ganó el sobrenombre de “graeculus”, que significaba “pequeño griego”.

Se interesaba por todo, intentó averiguar los secretos de la vida y de los hombres, y ascendía en la carrera social, bajo la protección de Trajano. Entre 91 y 117 ocupó diversos cargos en la administración pública, como los de cónsul, cuestor o tribuno de la plebe. En lo militar destacó luchando en varias legiones como la II adjutrix o la V Macedónica.

En 96 se casó con Vibia Sabina, sobrina nieta de Trajano. Adriano siguió al servicio de su tío y lo acompañó a las campañas de la Dacia. En 107 fue nombrado delegado imperial en la provincia de baja Panomia, y un año después obtuvo el título de cónsul. en 117, Trajano lo hizo su hijo adoptivo. Días después murió Trajano y Adriano asumiría el trono imperial.

Su mandato fue pacífico y equilibrado. Se gano el respeto de todas las instituciones de gobierno romanas. Viajó mucho para conocer de cerca la realidad de las provincias imperiales. Entre 121 y 125 se trasladó a las Galias, donde revisó guarniciones y ciudades, luego a Germania. Después desembarcó en Britania, donde ordenó la construcción de un muro de más de 100 kilómetros de largo, que separaba el sur romanizado del norte bárbaro.

Más tarde se traslado a su tierra natal de Hispania, donde pasó el invierno de 122-23 en Tarraco. De ahí se fue a tierras africanas, donde tenía lugar una rebelión de las tribus de Mauritania, de ahí pasó a Egipto, donde realizó un viaje por el Nilo acompañado de su amante Antinoo, que murió ahogado en las aguas del Nilo. Adriano volvió a Roma, donde remodeló el gobierno, prohibió los sacrificios humanos, subvencionó a los agricultores, etc.

En el 138, la hidropesía (acumulación de líquido en los tejidos) se apoderó de él, comenzó a hincharse y a sufrir hemorragias nasales. En julio de ese mismo año murió. Sus estos fueron enterrados cerca del río Tíber, en el mausoleo llamado Castel Sant-Angelo. Fue uno de los mejores emperadores romanos. Le sucedió Antonino Pío. Reinó desde 76 hasta 138....(continuará)                     

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