1 de agosto de 2014

AMOR ANIMAL


Las liebres y otros roedores siguen copulando durante la estación y se quedan de nuevo embarazadas por la fertilización de un óvulo liberado durante el embarazo. Las nuevas crías esperan a que nazcan sus hermanos mayores para ocupar su lugar en la matriz. Este fenómeno se llama “superfetación”.

Hay algunas especies de monos que se perfuman para atraer a las hembras, por ejemplo los capuchinos. Orinan sobre sus manos y se pasan el orín por la cabeza. A las hembras les encanta.

Los calamares y las sepias machos, para conquistar a las hembras cambian de color la piel. El dorso se vuelve rayado y con muchos colores, el vientre se vuelve rosado, y con los tentáculos acarician a la hembra. Si a ella le gusta su enamorado, él le introduce su enorme brazo copulador. Al poco tiempo, ella expulsa los huevos. Ambos los colocan en un lugar seguro y siguen copulando, hasta que mueren. Seguidamente sus compañeros se los comen.
              
Las tarántulas hembras, atraen al macho con falsas promesas de amor, una vez conseguido, los devoran sin llegar a copular. Las tarántulas que se alimentan de machos tienen más descendientes que las que solo comen lo que cazan.

Los machos de araña no tienen pene. Para aparearse, tejen una tela de seda en la que eyaculan por una abertura genital que tienen en el abdomen. Después mojan en el semen los pedipalpos (apéndices que tienen cerca de la boca) y los introducen en los conductos sexuales de la hembra. Algunos machos se automutilan y dejan en el interior de la hembra sus pedipalpos. De esta manera se aseguran que ningún otro meterá sus apéndices.

Las libélulas macho, para cortejar a la hembra, aletea detrás de ella, produciendo un zumbido que la excita. Después se desliza en el agua, para presumir. Si ella consiente, él la agarra por la nuca con sus pinzas anales, situadas al final del abdomen, y eyacula sobre la parte opuesta, donde se encuentra el apéndice que utilizará para limpiarla e inseminarla. Ella, todavía cogida del cuello, coloca el extremo de su abdomen en ese lugar. Las libélulas macho tienen una estructura especial en forma de cuchara para vaciar el esperma de los otros antes de depositar el suyo.

La rata topo, es calva, huele fatal y posee unos incisivos enormes. Vive en colonias con una sola hembra fértil, la reina; las demás son esterilizadas por unas hormonas, en la orina, que ella emite. La reina es más grande, de esta manera puede alojar hasta 27 crías en su interior. Para aparearse, la hembra y el macho, se miran de frente y chocan sus largos incisivos, después él la cubre. Cuando la reina muere, las demás hembras recuperan la fertilidad.

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