18 de marzo de 2012

MOMIAS DE ARICA


En la zona fronteriza entre Chile y Perú, en los Andes, se encuentra el desierto de Atacama, una de las regiones más secas del planeta. En esta zona habitó un grupo de población llamado “chinchorro” entre los años 6000 y 1500 antes de nuestra era. Los restos humanos conservados se conocen como “Momias de Arica”. Son los cuerpos momificados de mayor antigüedad, algunos de ellos datan del año 4000 antes de nuestra era.

Las momias de Arica fueron encontradas a principios del siglo XX por el investigador Max Uhler, unas cien momias muy bien conservadas, con eso se demuestra, que los chinchorros tenían un gran conocimiento de las técnicas de conservación, tal era su destreza que incluso momificaban a fetos.

Las momias de Arica no sólo son peculiares por su antigüedad, sino también por la forma en que las prepararon. En algunas momias la técnica parece una auténtica cirugía estética.

El cuerpo después de ser lavado y purificado, era sometido a tratamientos. Los momificadores sabían separar la piel del cuerpo, reforzar el esqueleto con varillas y más tarde recubrirlo con la piel enganchándola y disimulando cualquier tipo de fallo con una ligera capa de pintura.

En algunos cuerpos no era necesario sacarles la piel, sino que se procedía a la evisceración, y después el secado, tanto con humo como con fuego, se les cubría el rostro con arcillas y se les daba el toque final con una peluca en la cabeza. Para darle más vida a la momia se las dejaba con los ojos y la boca abiertos.

En la zona de Chinchorro existen otro tipo de momias, las llamadas “Momias Rojas”. Se momificaban sin grandes protocolos. La evisceración se lograba mediante acertadas incisiones en lugares precisos y se le introducían varillas muy finas de madera por debajo de la piel, para que el cuerpo quedara rígido. Cuando finalizaba el proceso, pintaban a la momia con ocre rojo y le ponían una peluca.

Las momias más antiguas reciben el nombre de “Momias negras”, se calcula que puede tener unos siete mil años. Despiezaban el cuerpo, no sólo de sus miembros sino también de la piel.

Las Momias Negras parecían más estatuas humanas que momias. Para ello se buscaba que el cuerpo mantuviera mucha rigidez, esto se lograba endureciendo las carnes mediante secado y reforzándolas con varillas y palos. Los miembros eran sujetados y engarzados en la estatua humana con cuerdas y pastas de ceniza que moldeaban el cuerpo hasta lograr que quedase perfecto.

Si les faltaba piel recurrían a la de lobo marino. Una vez terminada la momia, todo el cuerpo era pintado con una pasta negra que contenía manganeso y que le daba el color negro que más tarde le dio el nombre.

4 comentarios :

Merce DICE

Me fascina el tema de las momias y de cómo han llegado hasta nuestros días y la información que nos dan sobre aquellos tiempos.

Un beso Ana.

Ana DICE

Merce yo no sabía que me daban pánico hasta que fui a Egipto, tuve que salir de la sala de las momias del Museo Egipcio de El Cairo, me daba la impresión de que en cualquier momento se levantaban, quería mirarlas y no podía, así que les dí una ojeada rápida y salí por piernas. Un beso.

Anónimo DICE

Hola ANA muy buena tú información :) me sirvió de mucho en el cole gracias un beso soy cristian de argentina

Ana DICE

Cristian gracias a tí, un beso a Argentina y otro para tí.