16 de diciembre de 2010

MONASTERIOS


El monasterio tiene su origen en Oriente, principalmente en los desiertos de Egipto, donde surgieron en el siglo IV grupos de eremitas que vivían en pequeñas cabañas aisladas o en grutas naturales.

En el siglo V surgió un nuevo tipo de monasterio en el que se construían habitaciones de uso común (sala de rezos, cocinas…).

El tipo monasterio griego, de influencia bizantina, se extendió por Oriente hasta el siglo XVIII, formado por una iglesia situada en el centro de un amplio patio en el que se encuentran la fuente y el pozo, y está rodeado de las habitaciones de los religiosos, del refectorio y de otras dependencias.

En Occidente, después de los primeros centros monásticos, se estableció con la regla de San Benito, un tipo de monasterio distinto al griego, en torno a un patio, llamado claustro, se agrupan el refectorio, los dormitorios y la sala capitular, situada al lado de la iglesia.

Con las órdenes mendicantes, los monasterios se acercaron a los núcleos de población. Con las órdenes militares, el monasterio se convirtió en fortaleza, pero conservando las salas y habitaciones de vida en común.

Durante los siglos XVII y XVIII la construcción de monasterios siguió los modelos renacentistas. En el siglo XIX y XX la mayoría de monasterios se convierten en colegios y seminarios.

2 comentarios :

enrique DICE

Me gustan los monasterios y su arquitectura...

Ana DICE

Enrique a mi me encantan los monasterios y los conventos, aparte de por su arquitectura, por sus secretos. Un beso.