1 de octubre de 2010

EL CHOCOLATE COMO AFRODISÍACO


Desde siempre hemos escuchado muchas historias de las maravillosas cualidades afrodisíacas del chocolate. Casanova declaró que era mucho más vigorizante que el champagne, Madame du Barry se lo daba a todos sus amantes y Moctezuma siempre consumía grandes cantidades de él antes de visitar a sus esposas.

En el siglo XVII se consideraba tan violento inflamador de pasiones que se llegó a pensar en prohibir a los monjes que lo tomaran.En 1624, el teólogo Johanes Franciscus Rauch escribió: “Si semejante prohibición se hubiese llegado a cabo, el escandalo con el que esa santa orden ha sido marcada podía haber demostrado carecer de base”.

Casi un siglo más tarde un artículo en el periódico The Spectator en mayo de 1712 advertía: “Aconsejaré también a mis distinguidos lectores que tengan cuidado, muy particularmente, de cómo se entrometen en romances, chocolates, novelas y otros inflamadores por el estilo que yo considero muy peligrosos…”.

Puede que todo eso sean conjeturas, lo que es cierto es que existe una relación entre el chocolate y el estar enamorado. El chocolate contiene una sustancia química, llamada feniletilamina, que también se encuentra en el cerebro humano.

Esta sustancia es una anfetamina natural que es activada cuando la persona está enamorada, causando un sentimiento de total euforia. Cuando alguien no está enamorado y se siente bajo de ánimo y deprimido, es muy común que tomemos chocolate para consolarnos. Esto puede tratarse de una reacción natural del cuerpo para satisfacer la falta de esta sustancia.

2 comentarios :

Merce DICE

Mmmmmmmmm
Me encanta!!!

Chocolate negro, muy negro!!!

Ana DICE

Merce que bueno. Un beso.